En la madrugada del 12 de marzo de 2025, un incidente de violencia sacudió al Aeropuerto Internacional O’Hare de Chicago, uno de los más concurridos del mundo. Un altercado entre varios individuos en la zona de llegadas de Terminal 2 escaló hasta convertirse en un tiroteo, dejando a un hombre de 25 años herido de bala. Este suceso no solo pone en entredicho la seguridad de los aeropuertos estadounidenses, sino que también genera inquietud entre los viajeros y los profesionales de la aviación a nivel global, incluyendo a México.
Desarrollo del Tema
El incidente ocurrió aproximadamente a las 12:54 a.m. en la zona de llegadas de Terminal 2 de O’Hare, donde un grupo de personas se involucró en una pelea que rápidamente se intensificó hasta el punto de que alguien sacó un arma y disparó. El hombre herido, de 25 años, recibió dos impactos de bala en el cuerpo inferior y fue trasladado al Hospital Lutheran General, donde se reportó que su condición era estable.
Los testigos describieron la escena como caótica, con sonidos de disparos automáticos y personas huyendo en todas direcciones. Un testigo, un ex oficial de policía llamado James Van Schaick, quien se encontraba en un hotel cercano, describió el sonido de “disparos rápidos, como de fuego automático” y vio a las personas dispersándose en diferentes direcciones.
La policía de Chicago respondió rápidamente al incidente y cerró las vías de llegada de Terminal 2 para realizar la investigación. Se entrevistó a al menos una persona en conexión con el tiroteo, aunque no se han presentado cargos hasta el momento.
Tengamos en cuenta
Este incidente resalta la vulnerabilidad de las áreas no seguras de los aeropuertos, incluso en aquellos considerados entre los más seguros del mundo. Anthony Riccio, ex primer superintendente adjunto de la Policía de Chicago y actual director de seguridad pública de Monterey Security, señaló que la falta de presencia policial en horas de baja actividad puede aumentar el riesgo de incidentes como este. O’Hare, que atiende a aproximadamente 44 millones de pasajeros al año, es un ejemplo de cómo la seguridad puede ser comprometida en momentos de menor afluencia de pasajeros.
Además, este suceso pone de relieve la importancia de la vigilancia constante y la preparación para situaciones imprevistas. Para los aeropuertos mexicanos, este incidente sirve como un recordatorio de la necesidad de mantener protocolos de seguridad rigurosos y adaptarse a las condiciones cambiantes de seguridad.
Conclusión
El tiroteo en la Terminal 2 de O’Hare es un recordatorio sombrío de los riesgos que existen incluso en los entornos más seguros. Para la comunidad aeronáutica en México, este incidente subraya la importancia de la vigilancia y la preparación. La seguridad aeroportuaria no es solo una responsabilidad de las autoridades estadounidenses, sino también un desafío global que requiere la colaboración y el intercambio de mejores prácticas entre todos los actores del sector.
En un mundo cada vez más interconectado, los incidentes como este nos recuerdan la necesidad de reflexionar sobre nuestras propias medidas de seguridad y de estar siempre preparados para enfrentar cualquier situación imprevista.
Deja una respuesta